Esta Institución, por la formación de sus fundadores, D. Dámaso Alonso y Dª Eulalia y Dª María Dolores Galvarriato, hunde sus raíces en los principios pedagógicos y educativos de D. Giner de los Ríos a través de la Institución Libre de Enseñanza y se propone como meta despertar la curiosidad intelectual de los alumnos y formarlos para que sean capaces de tener criterio propio e independiente. El objetivo primordial de su educación es formar hombres de gran cultura, tolerantes y seguros de sí mismos, sin olvidar un sentido estético de la vida, la sensibilidad y el amor y cuidado de la naturaleza. Con estos objetivos educativos pretendemos formar hombres capaces de asumir sus responsabilidades sociales y profesionales.
El TRINITY COLLEGE – LICEO SERRANO durante la década de los 90 y bajo el lema de la «Excelencia Educativa» afronta los nuevos retos que plantea la educación en la sociedad del siglo XXI.Así, la Institución aporta a nuestros alumnos una formación de la máxima calidad apoyada en principios éticos y sociales y en el conocimiento de las ciencias y su metodología que capacita para la integración en la nueva sociedad que se está conformando y teniendo muy en cuenta el maravilloso y cambiante mundo de la información y de las nuevas tecnologías. Para ello contamos con un laboratorio de Informática, un aula de Multimedia y aulas para la música y la danza. Se pretende aunar el modelo pedagógico y el rigor científico de la Institución, con los últimos adelantos tecnológicos y la modernidad de las ideas.
La enseñanza de los idiomas adquiere un valor prioritario no solo en cantidad sino también en calidad: se prepara a los alumnos para obtener los prestigiosos títulos de la Universidad de Cambridge y se cuenta con un profesorado de idiomas de excelente preparación y profesionalidad. Los medios técnicos, entre ellos un Laboratorio de idiomas, que se ponen a su disposición son abundantes.
Entendemos que un buen proceso educativo y formativo se ha de fundamentar en el desarrollo de las capacidades intelectuales y habilidades sociales, en el esfuerzo personal y en la asimilación de una serie de instrumentos que permitan a los alumnos acceder al conocimiento con rigor. Estos instrumentos, en nuestra opinión, son: un buen método personal de trabajo, organización y disciplina para aprender, técnicas de trabajo intelectual, trabajo en equipo, manejo de las nuevas tecnologías y conocimiento de lenguas, no sólo de lenguas extranjeras sino también en la profundización y comprensión de la nuestra.
Hay que añadir algo más que consideramos básico en la formación de las personas: la asunción de valores morales y sociales reconocidos y apreciados en las sociedades civilizadas que hunden sus raíces en la cultura clásica como la libertad, tanto personal como social, el respeto al pensamiento ajeno, la solidaridad, la responsabilidad y los principios democráticos. La educación así entendida es flexible y proporciona a los alumnos las habilidades tanto intelectuales como sociales para su adaptación a las necesidades de la sociedad, que evoluciona y cambia de forma muy rápida.